Los Cristales gigantes de Naica en México, ubicado en la Mina de Naica, Chihuahua, son cristales de Selenita (yeso hidratado) de hasta 11 metros de largo y 1,2 metros de diámetro, con un peso de hasta 55 toneladas. Se caracterizan por ser transparentes y brillantes. Formados durante el Cretácico Superior, hace aproximadamente 26 millones de años.
En la Geología local se encuentran rocas volcánicas que corresponden a riolitas, andesitas y basaltos. Los cristales de selenita fueron producidos por intrusiones de magma rico en sílice, transformación de rocas de bajo a alta presión y temperatura, y un crecimiento dentro de cavidades subterráneas.
Dentro de la cueva se dan condiciones de temperatura de 57°C y humedad al 100%, con una alta presión debido a la profundidad (302 metros aproximadamente).
Esta cueva fue descubierta el año 2000 por un equipo de ingenieros en minas y científicos del Instituto de Geología de la UNAM. Se hace una conservación y protección del lugar con el control de la temperatura y humedad, protección contra vibraciones y movimientos, y restricciones de acceso para evitar el daño humano. Varias investigaciones científicas se han realizado en relación a su formación, condiciones ambientales extremas, y posibles aplicaciones en ciencia de materiales y biotecnología.